Los cimmerios de la Era Hyboria son descendientes de los colonos atlantes de la Era Turia. Habitantes del continente turio principal, estos colonos sobrevivieron al gran Cataclismo que sumergió la Atlantis y destruyó la mayor parte de la civilización turia. Los supervivientes, reducidos a un nivel de sofisticación propio de la Edad de Piedra, acabaron enfrascados en una guerra multigeneracional con los supervivientes de una colonia picta. Este prolongado conflicto provocó que los atlantes se degeneraran aún más hasta convertirse en poco más que hombres-mono. Sin ningún recuerdo de su historia pasada, ni siquiera del idioma ni de la civilización misma, estos humanos primitivos acabaron retro-evolucionando hasta convertirse en una raza conocida como los cimmerios.
Los cimmerios estaban rodeados de gente hostil, desde sus antiguos enemigos, los pictos, hasta los hostiles vanir del norte. También lucharon contra las Marcas Bosonias e incluso se abrieron paso hasta Aquilonia para realizar incursiones de saqueos.
Con la llegada de la era glaciar, los cimmerios huyeron ante la embestida nórdica. Ningún ejército ni ciudad los detuvo, mientras hordas de nórdicos los acosaban. Avanzando hacia el sur, casi destruyeron Gunderland y se abrieron paso hasta Aquilonia contra el Imperio picto. Derrotaron a los nórdico-nemedianos en Nemedia y saquearon algunas de sus ciudades antes de avanzar hacia el este, derrotando a un ejército Hyrkaniano en las fronteras de Brythunia.
Los cimmerios vagaron hacia el sureste, destruyeron Turan y se asentaron en las costas suroccidentales de Vilayet, que poco a poco se secaron y se convirtieron en el Mar Caspio. Se les unieron tribus nórdicas pastoriles que huían del siguiente cataclismo hacia el este y se mezclaron gradualmente con ellas, formando el pueblo ario. Su creciente población obligó a muchos de ellos a migrar hacia el sur, el norte y el oeste.
Población y cultura[]
Los cimmerios son bárbaros feroces, altos y de complexión robusta, de cabello negro y ojos azules o grises. Aunque la invasión Hyboriana nunca los afectó, parecen haberse beneficiado del contacto con los invasores y haber avanzado rápidamente en su cultura, más que sus antiguos rivales, los pictos.
Parecen ser cazadores-recolectores parcial o totalmente tribales, sin gobierno central y viviendo en clanes.[1] Conocen el oficio de herrero (el padre de Conan era herrero), pero se visten con pieles y cueros, mientras tejen ellos mismos con un estilo tosco y práctico. Los cimmerios tienen poco interés por la filosofía, las ciencias o el arte, pero parecen valorar el entretenimiento, especialmente en forma de narración. El propio Conan comenta: "Me vi con un taparrabos de piel de pantera, lanzando mi lanza a las bestias de la montaña".[2]
Los cimmerios son un pueblo forjado por las duras condiciones de su tierra. Los cimmerios se distinguen entre otras civilizaciones por ser un pueblo increíblemente sombrío. Robert E. Howard a menudo alude a la resistencia y destreza marcial de los cimmerios, así como a sus muchas otras impresionantes habilidades. Pueden escalar acantilados aparentemente insalvables, rastrear humanos o animales con facilidad y acechar a sus presas sin hacer ruido. El aparente primitivismo de los cimmerios y su sentido de la justicia a menudo se yuxtaponen con la corrupción de las razas "civilizadas" de Hyboria.
La cultura cimmeria no valora el materialismo por avaricia. Aunque se anima a guerreros como Conan a acumular riqueza y gloria, los cimmerios valoran el coraje, el honor, el respeto y el orgullo más que los tesoros. Se dice que nadie muere de hambre en Cimmeria a menos que todos mueran de hambre, pues cualquier familia cuidaría de quien lo necesitara.
Los cimmerios se inspiran en los celtas, concretamente en los gaélicos de la Edad Oscura, antepasados de los irlandeses y escoceses modernos. Howard afirma durante la Era Hyboria que «los gaélicos, ancestros de los irlandeses y los escoceses de las Tierras Altas, descendían de clanes cimmerios de pura sangre».
Religión[]
La deidad principal de los cimerios es Crom, un dios vengativo que se interesaba poco por los asuntos mortales. Se dice que él y su oscura prole nunca responden a las oraciones, pues esto se consideraba una súplica débil, debido a que Crom prefería que sus suplicantes murieran con honor en la batalla. Los propios cimmerios creen que hay poca esperanza en la vida o en el más allá y que los dioses no desean ser venerados, sino que es mejor dejarlos a su propia indiferencia hacia los mortales. Sin embargo, los cimmerios atribuyen su fuerza de brazo y espíritu a Crom, quien supuestamente les otorga fuerza y coraje al nacer para enfrentarse a sus enemigos en vida. Tras la muerte, los cimmerios creen que el alma vaga por la Montaña de Crom —un reino sombrío de nubes grises, nieblas frías y vientos quejumbrosos— por toda la eternidad.[3]
Otros dioses incluyen:
- Babd
- Diancecht
- Dagda
- Lir
- Macha
- Mannanan Mac Lir
- Morrigan
Personajes cimmerios[]
- Conan
- Corin
- Mara
- Nemain